El Brexit y sus consecuencias en el mundo del transporte de mercancías
Trabajar en el transporte de mercancías nos obliga estar al día de las nuevas políticas comunitarias. La inminente salida de la Comunidad Europea por parte de Gran Bretaña conlleva una serie de cambios en el transporte internacional.
Desde el pasado 24 de Junio, los ingleses decidieron, bajo referéndum, que no querían seguir perteneciendo a la Unión Europea. Tal decisión supondrá un cambio en el comercio con Reino Unido, el régimen de importaciones y exportaciones se tendrá que negociar y representará cambios en las relaciones comerciales con España.
La primera de las consecuencias vendrá de la derogación de la libre circulación de mercancías. Los transportes por carretera entre España y Reino Unido se verán limitados dando lugar a una menor importación de productos y a un descenso del transporte de productos agroalimentarios, de automoción y mercancía en general.
Aduanas. Se establecerán nuevas fronteras y tendrán que implantarse nuevos aranceles y nuevos criterios aduaneros, lo que encarecerá el coste de las mercancías que se exporten y las que se importen.
Según FENADISMER (Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España), las negociaciones con Reino Unido pueden llevar a tres soluciones:
La primera sería que Reino Unido estuviera fuera del mapa político pero dentro del Espacio Económico Europeo, este escenario permitiría el libre comercio entre el resto de los países de la Comunidad Europea y Reino Unido.
Un modelo de relaciones bilaterales con la Comunidad Europea.
Un modelo basado en la pertenencia del Reino Unido a la Organización Mundial del Comercio, con acuerdos bilaterales puntuales.
En cualquiera de los casos, la noticia del Brexit ha supuesto un golpe para todos los países que componen la UE porque abre la posibilidad de que nuevos estados quieran salir de la Unión Europea dando lugar a un nuevo mapa económico que repercutirá en los intereses de las diferentes empresas cuyo ámbito de trabajo son los países de la UE.